Capsulitis adhesiva del hombro

¿Qué es la capsulitis adhesiva?

La capsulitis adhesiva o también conocida como hombro congelado, es una patología del hombro en que aparece limitación del movimiento, mucha rigidez (muchas veces el hombro parece que está «pegado» al cuerpo, de ahí el nombre de hombro congelado) y mucho dolor.

Se trata de una inflamación de la cápsula articular del hombro y es tanta la inflamación que no deja posibilidad casi de movimiento en la articulación.

Es un problema bastante común, puede llegar a afectar al 5% de la población y la padecen principalmente las mujeres, de entre 40 y 70 años.

Causas del hombro congelado

La gran mayoría de veces no hay una causa concreta para padecerla, pero sí que hay factores de riesgo que aumentan las posibilidades de padecerlo. Estos factores de riesgo para la capsulitis adhesiva son:

  • Diabetes.
  • Problemas de la hormona tiroides.
  • Cambios hormonales (es muy frecuente que ocurra en la menopausia).
  • Lesiones o cirugías de hombro.
  • Lesiones o cirugías de cervicales.

Tratamiento del hombro congelado

Depende del grado de dolor y limitación del hombro, pero muchas veces es necesario la toma de antiinflamatorios o analgésicos para mejorar el dolor. Se trata de una patología de evolución lenta, que puede llegar a durar 1, 2 e incluso 3 años. El tratamiento de elección siempre es la fisioterapia, con especial hincapié con la movilización de la articulación (en la medida de lo que se pueda) y técnicas de fisioterapia para el alivio del dolor. Tu fisioterapeuta te evaluará y según tu caso personal serán unos ejercicios o técnicas de fisioterapia diferentes.

También es cierto que puede llegar a resolverse solo, sin necesidad de realizar ningún tipo de tratamiento, pero se suele alargar más en el tiempo todo este sufrimiento y llegar a los 3 años de dolor y falta de movilidad.

Contractura muscular: qué es y cómo tratarla

¿Qué es una contractura muscular?

Antes de explicar qué es una contractura muscular, es importante saber cómo es internamente el músculo. Un músculo se compone de muchas fibras y, que cuando hay que realizar un movimiento, estas fibras se unen con otras y así el músculos se «acorta» y se realiza la contracción.

Una contractura muscular ocurre cuando todas o algunas de las fibras de un músculo se encuentran contraídas y no son capaces de relajarse. Se produce porque hay una acumulación de los metabolismos que provocan inflamación o al no haber una suficiente irrigación sanguínea en  la zona, también se pueden deber a la fatiga excesiva de las fibras que al acabar el ejercicio o una postura mantenida ven disminuidas su capacidad de relajación.

¿Cómo se produce una contractura muscular?

Este es el orden de lo que pasa internamente ante una contractura:

  1. El tono muscular aumenta. El músculo se vuelve rígido y un poco más duro.
  2. El movimiento del músculo disminuye.
  3. Menor riego sanguíneo en la zona (no se puede oxigenar bien).
  4. Aumentan las sustancias de desecho en el músculo ya que la sangre no circula con tanta facilidad.
  5. Se irritan las terminaciones nerviosas, bien porque el músculo las está comprimiendo o bien por irritación pos las sustancias de desecho.
  6. Todo esto hace que haya bastante dolor, y que a su vez empeore la contractura por el dolor sufrido.

Esto puede ocurrir en cualquier músculo, pero es más frecuente en los músculos de la espalda (contracturas en la zona lumbar y zona cervical sobre todo) porque estos músculos son los principales en mantener la postura, y al usarse tanto tiempo seguido, a veces algunas fibras tienen problemas para relajarse y volver a la posición original.

Síntomas de una contractura muscular

Depende del número de fibras musculares que está contraído, pero generalmente:

  • Dolor al movimiento y si está muy inflamado también en reposo.
  • Limitación a la hora de realizar los movimientos.
  • A la palpación puede llegar a notar una zona más tensa que el resto del músculo.

Cómo tratar las contracturas musculares

La principal manera de aliviar y tratar estas contracturas es mediante la fisioterapia. Dentro de la fisioterapia hay diversas técnicas que pueden ser de utilidad:

  • Termoterapia. La aplicación de calor en la zona aumenta el riego sanguíneo y rompe el círculo vicioso.
  • Masoterapia. Es decir, el masaje terapéutico alivia mucho las contracturas musculares.
  • Punción seca. El uso de esta técnica de introducir un aguja sin medicamento en un punto determinado del músculo contracturado (punto gatillo) ayuda a relajar el músculo.
  • Estiramientos. Estirar el músculo es importante para devolver la extensibilidad de este músculo e ir aumentando la movilidad.
  • Ejercicio terapéutico. Aunque puede parecer una contradicción, la realizar ejercicios terapéuticos provocará un aumento de sangre en la zona y poco a poco irá mejorando la contractura.

Pero, pese a todo esto, el tratamiento más eficaz y eficiente es la prevención. Realizar ejercicio frecuentemente, estirar y beber suficiente agua con fundamentales para evitar tener contracturas musculares.

Enfermedad de Dupuytren

¿Qué es la enfermedad de Dupuytren?

La enfermedad de Dupuytren es una enfermedad de causa desconocida, aunque en algunos casos sí que tiene carácter genético y afecta a las manos.

Síntomas

El principal síntoma es que los dedos de la mano empiezan a retraerse, todo esto debido a una contractura de la fascia palmar. En alguno casos, se puede incluso palpar un nódulo de fibrosamiento en la palma de la mano. Estos síntomas suelen ir poco a poco incrementándose en el tiempo.

Tratamiento para Dupuytren

Existe varias opciones terapéuticas: existe la más conservadora que es la fisioterapia, después terapia médica con infiltraciones, y , por último, la cirugía. En este caso vamos a centrarnos en la opción conservadora:

Fisioterapia para la enfermedad de Dupuytren

Es muy importante empezar por el tratamiento más conservador y con menos complicaciones. Cabe decir que cuanto antes se detecte y se empiece a tratar, es más fácil que la fisioterapia tenga éxito.

¿Qué técnicas se usan en fisioterapia?

En el caso del Dupuytren, se usarán técnicas encaminadas evitar que evolucione a peor la contractura formada en la palma de la mano y en estirar los dedos para evitar mayores retracciones. Las técnicas usadas son:

  • Termoterapia: el calor sirve para «ablandar» la contractura y que sea más maleable. Para este efecto se puede usar infrarrojos, ultrasonidos continuos, parafina…
  • Estiramientos: Estiramientos para los dedos y la palma de la mano.
  • Ejercicios de fuerza: este engrosamiento junto con la retracción de los dedos hace que la mano se debilite, por lo que es muy importante mantener esta capacidad el máximo tiempo posible. Los ejercicios de fuerza pueden ser con resistencia de una goma, con pinzas, pelotas con diferente resistencia…
  • Ejercicios de motricidad: Como la mano tiene una funcionalidad compleja, es muy importante recuperar y mantener la máxima funcionalidad posible.

Pese a todo eso, a largo plazo la contractura palmar irá yendo a peor y se pasará al siguiente escalón médico que son las infiltraciones, y si este a largo plazo no funciona, la solución será la cirugía. Cabe resaltar que aunque parezca que la cirugía es la única solución, ésta no es la panacea y se necesita también fisioterapia después de la cirugía, y algunas veces se vuelve a reproducir el mismo síntoma en otros dedos de la mano.

Por todo eso, merece la pena ralentizar al máximo el proceso de fibrosamiento y hacerle frente cuanto antes.

Tendón supraespinoso roto: ¿ahora qué?

Músculo supraespinoso

El músculo supraespinoso se sitúa en la parte superior del hombro. Es un músculos bastante pequeño que se encarga de realizar la abducción (o separación del brazo del cuerpo) y la rotación externa del hombro. Forma parte del manguito de los rotadores (aquí te cuento más acerca del manguito rotador).

Este tendón suele sufrir bastante el desgaste y la presión mecánica, por lo que suele ser el primer tendón del manguito rotador en romperse o deshilacharse, provocando limitación en la movilidad del hombro, dolor y, por eso, limitación en las actividades diarias.

¿Cuáles son las opciones de tratamiento para el supraespinoso roto?

Tan solo oír que hay un tendón o músculo roto se piensa directamente en cirugía. En el caso del tensón supraespinoso roto no es tan cierto porque al trabajar muy íntimamente con los otros músculos del manguito rotador (infraespinoso, subescapular y redondo menor), toda la función se puede suplir reeducando y fortaleciendo estos tendones que sí que están sanos. Es más, si se trata por un rotura debida a desgaste que ha ido apareciendo paulatinamente, la persona puede no ser consciente de que tiene este tendón roto.

Y, ¿por qué sí que hay gente que se opera de este tendón y del manguito rotador?

El médico traumatólogo valorará cada caso, y cuando se vean involucrados varios tendones, o cuando no haya otra opción, se decidirá a operar.

En la actualidad hay muchos estudios que priorizan SIEMPRE primero la opción de tratamiento conservador mediante la fisioterapia, ya que no se ha observado que haya evidencia en que la operación es más efectiva que el tratamiento conservador. Ni a corto ni a largo plazo. De hecho, al ser la fisioterapia un tratamiento menos propenso a complicaciones comparado con una cirugía, es la tratamiento inicial más adecuado.

Uno de estos estudios:

Conclusión:

  1. Acude primero a un especialista que te diagnostique si realmente tienes el tendón supraespinoso roto.
  2. Siempre intenta que la primera opción de tratamiento sea la más conservadora posible, es decir, la fisioterapia.
  3. Dale un poco de tiempo a que los músculos de alrededor se fortalezcan.
  4. Y, por última instancia, si pese a todo, afecta mucho tu calidad de vida, entonces valora la cirugía.

Escoliosis: qué es, síntomas y tratamiento

¿Qué es la escoliosis?

La escoliosis es una desviación de la columna vertebral. Lo más característico es la desviación lateral del las vértebras, pero cuando esto ocurre, normalmente, la desviación es tridimensional e implica también una rotación y torsión de las vértebras.

Esta desviación suele aparecer en la adolescencia y su causa es desconocida en la gran mayoría de casos. Puede presentarse en la infancia en niños que padecen de parálisis cerebral o distrofia muscular.

Síntomas de la escoliosis

Cuando pensamos en desviación de columna, muchas veces lo primero que se nos viene a la cabeza es el dolor. Es cierto que puede doler en algunos casos, pero hay muchos otros en los que no hay dolor. Los síntomas principales son:

  • Tener la sensación de una pierna más corta/larga que la otra.
  • Un hombro más alto que el otro.
  • Cintura desigual.
  • Una parte del tórax sobresale más que la otra.
  • Al agacharse hacia delante, una escápula sobresale más que la otra.

Tratamiento

Es muy importante cuidarse y realizar un adecuado tratamiento, ya que si se deja evolucionar puede traer importantes complicaciones. Las posibles complicaciones son: problemas respiratorios y cardíacos y la mayor probabilidad de tener dolor de espalda en un futuro.

El tratamiento de la escoliosis es necesario individualizarlo. Según los grados de desviación de la espalda se necesitará sólo fisioterapia, fisioterapia junto con un corsé o, en casos muy graves, la cirugía.

Tratamiento de fisioterapia para la escoliosis:

  • Ejercicios de fortalecimiento de la musculatura de la espalda. Esta parte es primordial para estabilizar toda la columna. Según si afecta más a la parte superior o inferior, es muy conveniente fortalecer también brazos y piernas.
  • Ejercicios de flexibilidad de la espalda.
  • Estiramientos de la parte posterior de las piernas. Muchos pacientes con escoliosis tienen acortamiento de los músculos isquiotibiales, por lo que también es muy importante estirarlos.
  • En el caso de dolor, también se pueden usar técnicas de fisioterapia analgésicas. Estas pueden ser el uso de TENS, termoterapia, masaje…

Finalmente, como parte fundamental del tratamiento y adecuado manejo de la escoliosis, concienciar a la persona que debe realizar ejercicio físico regularmente. Los deportes más aconsejados son: natación, pilates y ejercicios de musculación.

Rotura de meniscos de la rodilla: lesión y tratamiento

¿Qué función tienen los meniscos?

Los meniscos son unos trocitos de fibrocartílago que hay en algunas articulaciones entre ambos huesos. Sus funciones son:

  • Estabilizar la articulación
  • Poner límite al movimiento de la articulación
  • Amortiguar la carga soportada

No todas las articulaciones tienen este fibrocartílago, los meniscos solamente se encuentran en: la rodilla (el más conocido), la articulación temporomandibular, la acromioclavicular, la esternoclavicular, la muñeca y las costillas.

Meniscos de la rodilla

En la rodilla tenemos dos meniscos: uno en la parte interna con forma de C y se le llama menisco interno o medial; y otro en la parte externa con forma de O, al que se le llama menisco externo o lateral.

Estos meniscos están unidos a la tibia mediante ligamentos, pero tienen un ligero movimiento. Los movimientos del menisco son:

  • Si la rodilla se flexiona, los meniscos se desplazan hacia atrás y si la rodilla se extiende se desplazan hacia delante.
  • Si se realiza rotación externa de tibia: el menisco interno va hacia detrás y el lateral hacia delante.
  • Si se realizar rotación interna de tibia: el menisco interno va hacia delante y el lateral hacia detrás.

Lesión de menisco de la rodilla

Normalmente, los meniscos se lesionan por movimientos muy bruscos de la pierna, en los que el menisco no es capaz de seguir el movimiento de la tibia y se queda «atrapado» en la articulación. Al quedarse atrapado, el menisco se deshilacha, se rompe o se desgarra.

Síntomas de menisco roto

Cuando el menisco se rompe por un movimiento muy brusco se suele notar al instante. Los síntomas son los siguientes:

  • Chasquido.
  • Dolor, especialmente al intentar girar la rodilla.
  • Sensación de que la rodilla está encajada y no se deja mover.
  • Dificultad para estirar totalmente la rodilla.
  • Sensación de falta de fuerza o flojedad en la rodilla.
  • En algunos casos también se puede inflamar la zona.

Tratamiento del menisco roto

Dependiendo de la gravedad de la rotura y sus síntomas, puede ser necesaria una cirugía para realizar una sutura de los meniscos o meniscectomía (quitar el menisco o parte del menisco que está roto). Aunque solamente se realiza la cirugía si es estrictamente necesario, ya que puede desencadenar una artrosis precoz.

Generalmente, la fisioterapia puede ser de gran ayuda y es la parte principal del tratamiento:

  • Aplicar hielo si hay inflamación en la zona.
  • Evitar realizar giros de rodilla al principio.
  • Fortalecer toda la pierna y, en especial, el cuádriceps. Para ello, realizar según tolerancia isométricos de cuádriceps, extensiones de rodilla con resistencia, sentadillas, zancadas…
  • Aplicar técnicas analgésicas para disminuir el dolor en la zona.
  • Mediante ejercicios y movilizaciones, ir ganando poco a poco más movilidad.

Articulación sacroilíaca

Anatomía

La articulación sacroilíaca es la unión del hueso sacro con el hueso ilíaco, de ahí su nombre. En el cuerpo humano hay dos articulaciones sacroilíacas, ya que cada una va a un lateral del sacro.

Se trata de una articulación de tipo plano, por lo que su movimiento son deslizamientos, y estos deslizamientos son mínimos porque su superficie articular y su cartílago son muy amplios y rugosos. Aunque su movimiento sea mínimo, sus deslizamientos son muy importantes para amortiguar el impacto del peso al andar y para facilitar y minimizar el gasto energético de la marcha.

Es una articulación muy bien estabilizada y fijada por los siguientes ligamentos:

  • Ligamento sacro-ilíaco anterior.
  • Ligamento sacro-ilíaco interóseo.
  • Ligamento sacro-ilíaco posterior.
  • Ligamento sacro-tuberoso. Une el sacro con la tuberosidad isquiática y sobrepasa la articulación sacroilíaca.
  • Ligamento sacro-espinoso. Une el sacro con la espina ilíaca (protuberancia que tiene el hueso ilíaco).

Lesiones de la zona sacroilíaca

Como cualquier otra articulación puede sufrir fracturas, luxaciones e inflamación. Al ser una articulación tan estabilizada y con poco movimiento, generalmente, lo más frecuente es encontrarse con dolor en la articulación (debido a alguna disfunción) e inflamación.

Disfunción de la articulación sacroilíaca

Una disfunción significa que la articulación no funciona correctamente, puede ser por exceso de movimiento (hipermovilidad) o por falta de movimiento. Esto produce dolor en la zona y puede repercutir en la zona lumbar, pelvis y piernas.

Sacroileitis

La sacroileitis es la inflamación de la articulación sacroilíaca. Puede ser que se trate solo de una inflamación pero también puede ser que forme parte de una enfermedad reumática autoinmune. En el caso de la enfermedad reumática puede confundirse muy fácilmente con un dolor lumbar por sus síntomas.

Cómo aliviar el dolor de la articulación sacroilíaca

Es muy importante acudir a un profesional sanitario para el correcto diagnóstico de este dolor. Generalmente, para el tratamiento de este dolor funciona muy bien la fisioterapia. Por ello, usando medios físicos como estiramientos, fortalecimiento de los músculos insertados en la zona (músculos glúteos, pelvitrocantéreos, extensores lumbares y abdominales), terapia manual, masajes, vendaje neuromuscular…. es efectivo y mejora y alivia el dolor. En algún caso en particular puede ser necesario tratamiento farmacológico para aliviar la inflamación y dolor (especialmente en el caso de que se trate

¿Qué son las hernias discales?

El nombre de «hernia» se utiliza en medicina para hablar de alguna parte blanda que está más salida de lo que debería de ser normal por un orificio. Puede ocurrir en varias partes del cuerpo, por ejemplo: hernia de hiato, hernia inguinal… En este caso vamos a hablar acerca de las hernias de disco o hernias discales.

La hernia discal se produce en el disco intervertebral (de ahí a que el nombre es hernia discal y no hernia fiscal). En este caso el disco que hay entre las vértebras se encuentra dañado. Este disco tiene alrededor un anillo fibroso para proteger el centro, que es un núcleo pulposo parecido a la gelatina. Esta estructura es la ideal para proporcionar amortiguación y movimiento a la columna. Cuando se daña el disco realmente se daña el anillo fibroso, se «deshilachan» algunas de sus fibras, por lo que crea un agujero y la gelatina de dentro sale a través de este orificio. Todo esto sería una hernia discal.

Esquema de hernia discal

Las hernias de disco pueden estar a lo largo de toda la columna, pero lo más común es que se presenten en la zona cervical y en la zona lumbar, ya que son las zonas con mayor movilidad.

¿Una hernia discal es lo mismo que una protusión discal?

Una protusión es una hernia discal incipiente, se trata de que el disco tiene un ligero abultamiento porque la pared del anillo fibroso está más débil, pero aún no hay orificio por donde pueda salir la sustancia gelatinosa. En el caso de que esta pared se continuara debilitando y abriera un agujero ya estaríamos hablando de hernia de disco. Pero con una adecuada prevención y tratamiento no tiene por qué en convertirse en hernia de disco.

Síntomas de la hernia de disco

Es muy importante saber que una hernia puede no dar absolutamente ningún síntoma. Y otras veces puede dar sintomatología. En el caso de tener síntomas pueden ser los siguientes:

  • Dolor en la espalda, que suele ser punzante localizado en la zona de la hernia. Cabe recalcar que se puede tener dolor de espalda sin tener hernia de disco o protusiones.
  • Dolor irradiado por la pierna (si la hernia está en las lumbares) o en el brazo (si la hernia está en el cuello). Depende de por donde se irradie se puede saber qué nervio es el afectado.
  • Adormecimiento y entumecimiento de los brazos o piernas.
  • Debilidad: en el brazo (en el caso de hernia cervical) o en la pierna (en el caso de hernia lumbar). Cuando ocurre en la pierna suele dar lugar a cojera.

Tratamiento

El tratamiento dependerá del nivel de afectación y gravedad de la hernia. El primer paso siempre debe de ser la fisioterapia para tratarlo y tener una buena prevención para futuros problemas de espalda. Después está el tratamiento farmacológico con analgésicos y AINES o medicaciones más fuertes, según la gravedad del dolor. Y, en el último nivel, está las infiltraciones o incluso la opción quirúrgica.

Tratamiento de fisioterapia

En cuanto a fisioterapia se puede mejorar la sintomatología de una hernia mediante:

  • Ejercicio de fortalecimiento de la musculatura profunda, destinada a proteger la espalda y fortalecimiento de las partes afectadas que se encuentran debilitadas (brazos y/o piernas).
  • Estiramientos. Normalmente se está en una posición de protección frente al dolor que produce que se acorten algunos músculos. Es muy importante estirar esos músculos para poder volver a adoptar una postura correcta.
  • Neurodinámica. Se trata de ejercicios para estirar y liberar los nervios periféricos.
  • Cambios en el estilo de vida y cuidados de la espalda en su día a día para prevenir futuras recaídas. Aquí te doy algunas pautas para aliviar el dolor de espalda en caso de que tengas.

Trocanteritis o bursitis de cadera

¿Qué es la trocanteritis?

La trocanteritis o bursitis de cadera son los términos médicos que se usan para hablar de la inflamación de la bursa que hay en la parte lateral de la articulación de la cadera. Recibe el nombre porque la prominencia lateral del fémur se llama trocánter mayor y la bursa que se inflama está junto encima de esta prominencia.

Síntomas de la trocanteritis

El principal síntoma de esta inflamación es el dolor en la cadera. Este dolor puede llegar a producir cojera y dificultad para caminar. Y, también, al tratarse de una inflamación puede notarse la zona hinchada y caliente.

Causas

Las principales causas de la trocanteritis son:

  • Traumatismo previo: caída o golpe justo en la cadera que hace que se inflame.
  • Sobre uso de los músculos de la cadera.
  • Desequilibrio en la longitud de las piernas.
  • Apoyo inadecuado en la planta del pie al andar.
  • Escoliosis.
  • Debilidad en la musculatura de la pelvis.
  • Tener las caderas anchas, ya que añade un sobreestiramiento al músculo tensor de las fascia lata, que está justo encima de la bursa trocantérea.

Por todas estas causas es común en mujeres porque cuentan con una pelvis más ancha y también, a nivel de actividad deportiva, es muy frecuente que la sufran los porteros del fútbol.

Trocanteritis y dolor lumbar

Estas dos patologías están muy relacionadas y muchas veces se presentan a la vez. A veces es difícil saber cuál de las dos ha empezado primero, pero esto pasa porque suelen tener las mismas causas. Ambas pueden estar causadas por debilidad de la musculatura de la pelvis, por deformidad estructural (escoliosis, o tener una pierna más larga que la otra), traumatismo previos… Además cabe destacar que las dos patologías presentan en la mayoría de los casos cojera. Cuando no se camina correctamente se van usando músculos de forma incorrecta que hacen que más estructuras sufran y duelan, por eso es muy común que caminando mal por la cadera nos lesionemos también la zona lumbar, y viceversa.

Tratamiento

Dependiendo de la gravedad del dolor o inflamación puede llegar a ser necesario tomarse algún fármaco antiinflamatorio o analgésico.

La fisioterapia se encarga del grueso del tratamiento de la bursitis de cadera. Lo principal el acondicionamiento muscular de la zona de la pelvis y de toda la pierna: ejercitando los músculos débiles y estirando los acortados. Se entrena y practica la marcha para evitar la cojera y también la propiocepción.

Bruxismo

Qué es el bruxismo

El bruxismo es una afección en la la persona que lo sufre tiende a apretar los dientes, rechinarlos dientes, normalmente de manera inconsciente, durante un periodo largo de tiempo. Este exceso de apretar genera muchos problemas a largo plazo, por lo que se debe prevenir y tratar lo antes posible.

¿Qué es lo que provoca el bruxismo?

La aparición de este rechinar se debe a múltiples factores:

  • Factores psicológicos como la ansiedad, depresión y estrés. Es un factor muy importante en la aparición del bruxismo nocturno sobre todo.
  • Tabaquismo
  • Personas con maloclusión de la boca, es decir, que la dentadura superior y la inferior no encajan bien al cerrar la boca.
  • Predisposición genética
  • Traumatismos
  • La toma de ciertos fármacos: dopaminérgicos, noradrenérgicos, antidepresivos, serotoninérgicos, GABAérgicos y psicotrópicos.

Síntomas

Los síntomas son muy amplios y pueden llegar a ser muy diferentes según el la intensidad de este bruxismo. Los más comunes son:

  • Dolor en la mandíbula.
  • Dolor de cabeza.
  • Dientes limados o más pequeños de lo normal por el rozamiento (si el rechinamiento es muy severo puede llegar a romper alguna pieza dental).
  • Sensibilidad dental (al frío, al calor..)
  • Ansiedad, depresión y tensión. Los factores psicológicos producen un círculo vicioso, ya que cuanto más se apreten los dientes más tensión se crea, por lo que más se seguirá apretando los dientes.
  • Dolor de oído: la artIculación temporomandibular (ATM) está tan cerca del oído que cualquier inflamación se irradia hacia el oído.
  • Dolor e inflamación en la mandíbula.
  • Problemas del sueño e incluso insomnio.

Tratamiento del bruxismo

El tratamiento se debe enfocar en tratar la causa del bruxismo para que esté desaparezca y también en aliviar todos los síntomas provocados.

Para tratar el bruxismo de raíz y que desaparezca, según el caso, habrá que:

  • Alinear los dientes para asegurarse de que la mordida es correcta
  • Tratamiento psicológico para tratar la ansiedad, estrés o depresión que sufra la persona.
  • Dejar el tabaco

Como hay factores de riesgo que son muy difíciles que desaparezcan del todo o incluso imposibles (como el factor genético), para paliar los síntomas se aconseja:

  • Férula de descarga: muy importante para que no haya mayor desgaste en las piezas dentales. Esta férula se coloca por las noches o en ratos de reposo, pero no frena el «apretar», solamente protege los dientes para que no se limen más.
  • Estiramientos de los músculos de la ATM.Esta parte sí que alivia el dolor en la mandíbula y cabeza.
  • Fisioterapia de la ATM: aquí encontraríamos los estiramientos, masaje de la zona mandibular, ejercicios para fortalecer los músculos agonistas, terapia manual para relajar y aliviar el dolor de cabeza.
  • Relajación.
  • Evitar masticar chicles.
  • Tener buenos hábitos alimenticios y de sueño.